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El Invima advierte que el Interferón no cuenta con registro sanitario, médico Klinger defiende su uso

Por en julio 30, 2020

Unicauca aclara que la investigación y el uso del Interferón no hacen parte de la labor investigativa de la institución, que se trata de una iniciativa de la Fundación Klinger. 

A raíz de la pandemia por el Coronavirus-Covid-19, el médico Julio César Klinger, ha venido promocionando un tratamiento para combatir el Covid-19 con el medicamento Interferón Sublingual Beta-1B, que dice ha investigado la Fundación que lleva su nombre, y que no solo sirve para tratar este virus, sino también el mal de Alzheimer.

Al respecto en las redes sociales se publican comentarios a favor y en contra del uso de ese medicamento, que para algunos es efectivo, incluso por el solo hecho de la confianza que les inspira el ex docente de la Universidad del Cauca, que por diferentes medios de comunicación ha promovido su milagroso Interferón. Otros, en cambio, no piensan lo mismo. Recientemente, en comunicado la Asociación Colombiana de Infectología, indicó que el Interferón en gotas no tiene evidencia científica que avale su uso.

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Sin embargo, por miedo a ser víctima del virus, mucha gente busca un salvavidas y cree haberlo encontrado en este interferón en gotas, por lo que hasta la residencia del médico Klinger, en el barrio Machángara de Popayán, han llegado romerías para adquirir ese medicamento. Ha sido tal la multitud, en época de pandemia, que el lunes 27 de julio tuvo que intervenir la Policía para poner orden. A raíz de lo ocurrido, en el Facebook del médico Klinger se puso el siguiente aviso: “El día de hoy debido al desorden público y aglomeraciones, hemos decidido NO dar atención en el consultorio hoy, en cambio se harán los pedidos vía WhatsApp al 3234882802 o 3122895493. No responderemos llamadas, solo WhatsApp. Por favor, solicitamos su colaboración, orden y paciencia con los pedidos, para así poder atenderlos en el menor tiempo posible. Agradecemos toda la confianza y apoyo en nosotros. Recomendaciones: Si ya nos escribió, por favor no insista, estamos trabajando en responderles a todos ustedes”.

¿Por qué se pronunció el Invima?

Hace días en redes sociales comenzaron a aparecer publicaciones muy críticas del payanés, Freddy Ladino, (Ed Ladino), joven comunicador social, que hace un año reside en Hamburgo, Alemania, quien se interesó en conocer acerca del ensayo clínico efectuado por la fundación Klinger sobre Interferón, y luego de informarse sobre el particular, elevó varios derechos de petición, en primer lugar al Instituto Nacional de Vigilancia de Medicamentos y Alimentos (Invima), para que se le informara acerca del “estudio clínico”, de si el fármaco tenía registro sanitario, así como autorización del Invima para uso como tratamiento preventivo y curativo del Covid-19. Además, que de no ser así, solicitaba que, como autoridad sanitaria reguladora, investigara lo que estaba pasando en Popayán con el interferón del médico Klinger.

Cada una de las preguntas le fueron respondidas por la directora técnica de Medicamentos y Productos Biológicos del Invima. En primer lugar, que esa entidad no tenía conocimiento sobre dicho estudio. Que ninguno de los protocolos de investigación clínica presentados para evaluación y aprobación ante el Invima involucraba el uso de Interferón como tratamiento preventivo y/o curativo de la infección por SARS-Cov-2 o Covid 19. “Por lo tanto en Colombia no han sido presentados para evaluación, ni se encuentran aprobados estudios clínicos con el medicamento mencionado con principio activo Interferón y que se administre vía sublingual, no cuenta con registro sanitario vigente, por tanto no cuenta con autorización para ser comercializado ni utilizado en tratamientos médicos”, precisó la autoridad sanitaria de Colombia.

Le informó también, que esa respuesta se había remitido con la petición, al grupo de Unidad de Reacción Inmediata (GURI) del Invima para el inicio de la respectiva investigación del caso presentado.

Traslado de la denuncia

Con fecha 27 de julio, el Invima le ofició a la Secretaría Departamental de Salud del  Cauca, trasladándole la denuncia del ensayo clínico con el producto Microdosis Sublinguales de Interferón β 1-B de Popayán.

Entre otros aspectos dice: “Teniendo en cuenta que en la denuncia están referenciando la Fundación Julio Klinger, en cabeza de Julio César Klinger, quien en asociación con diferentes instituciones de la ciudad están realizando el “ensayo clínico” con el producto Microdosis Sublingual de Interferón β 1B, sin contar con las autorizaciones respectivas por parte del Invima y adicionalmente están realizando actividades de publicidad y comercialización de medicamentos homeopáticos marca Interferón sin el respectivo registro sanitario Invima, atribuyéndole indicaciones no autorizadas para el tratamiento y prevención de la Covid 19, actividades que son consideradas fraudulentas, damos traslado del caso a su despacho y amablemente solicitamos adelantar las acciones de inspección, vigilancia y control al establecimiento de su jurisdicción, denominado Fundación Julio Klinger y sobre las instituciones de salud asociadas en el “estudio clínico”, con el fin de corroborar los hechos denunciados y aplicar las medidas sanitarias pertinentes. Del traslado del caso a su despacho se informó al usuario”. 

Sin embargo, la Secretaría Departamental de Salud del Cauca, todavía no se ha pronunciado sobre la actividad de la Fundación Klinger y el Interferón. Se sabe que está analizando el caso.

Protocolo prueba piloto 

En la prueba piloto del estudio sobre el Uso Clínico de Microdosis Sublinguales de interferón β-1b para la respuesta inmune antiviral contra el SARS-Cov -2 durante la pandemia en el Departamento del Cauca, de la Fundación Klinger, figuran en la Dirección Científica, Julián Alberto Herrera Murgueitio, MD, facs, phd profesor titular-emérito y Honorario de Medicina, Universidad del Valle. Investigadores área Clínica y Epidemiológica, Julián Alberto Herrera. MD, facs, phd; Julio César Klinger, MD, msc; María Lilia Díaz, MD, Emi; Rodolfo Moreno, MD, msc, phd © ; Ángela Cubides, MD, msc; Eder Villamarín, MD, msc; Giovanni Apráez, MD, mph, phd, Julián Eljach. MD. Mba; Juan Pablo Herrera Escobar, MD, mph.; René Zúniga López. MD.mph; Jorge Martín. MD, msc, phd; Rolando Enrique Peñaloza. od, msc, phd. Investigadores Área Farmacología y Química Farmacéutica: Greicy Castilla, QF; Silvia Espitia, QF; Antistio Alviz, QF, phd; Ricardo Benítez, phd; Thayron Gonzáles, QF y Raquel Bastidas, NU. 

Colaboradores Área Académica

Doris González-Fernández. MD, msc, phD. Posdoctoral Research Fellow. Faculty of Nutrition. McGill University. Toronto, Canadá; Paola Andrea Gómez. PhD. Departamento de Química, Universidad del Cauca; César Sarria. MD, MBA. MD, MBA, gerente Hospital Universitario San José, Popayán; Guillermo A. Mosquera. IAG, MSC. Logística: María A. Rosero – María C. Bolaños (Universidad del Valle) 

Instituciones que apoyan con su talento humano 

Ministerio de Salud – Gobernación del Cauca – Universidad del Cauca, Universidad del Valle y Universidad de Cartagena. 

También dice que participan como investigadores principales Líderes de Grupos de Investigación Reconocidos por el Ministerio de Ciencias: Grupo de Inmunología y Enfermedades Infecciosas; Grupo de Farmacología y Terapéutica; Grupo de Salud Sexual y Reproductiva; Grupo de Química de Productos Naturales, Grupo de Investigación en Salud Pública.

Médico Julio César Klinger, dirige la Fundación que lleva su nombre, y quien defiende el uso del Interferón Beta-B1.
 

Posición de Unicauca    

Por su parte la Universidad del Cauca emitió un comunicado, de fecha 26 de julio de 2020, el cual lleva la firma del rector,  médico José Luis Diago Franco, en el cual aclara que la investigación y el uso de Interferón Sublingual Beta- 1 B, no hacen parte de la labor investigativa de esa institución de educación superior, que se trata de una iniciativa que lidera la Fundación Klinger, por lo tanto, ni los docentes ni equipos de investigación de Unicauca están comprometidos con el uso de este tratamiento médico.

“Desde la parte científica respetamos las diferentes iniciativas que se generen para buscar soluciones frente a la prevención, manejo y control de enfermedades que afecten a la población humana, siempre y cuando cumplan con los protocolos internacionales definidos para los ensayos clínicos, máxime cuando se trata de una pandemia como la que estamos afrontando en la actualidad”, dice el comunicado.

Agrega, que el médico Julio César Klinger, egresado del programa de Medicina de la Facultad de Ciencias de la Salud y quien fuera docente de esa alma mater hasta el 6 de marzo de 2020, se ha caracterizado por su trayectoria científica y profesional en temas relacionados con la inmunología, teniendo en cuenta su preparación académica y labor investigativa. Igualmente se destaca por su trabajo comprometido con las diferentes comunidades.

“Consideramos que serán las autoridades competentes como el Ministerio de Salud y Protección Social y el INVIMA las encargadas de esclarecer la efectividad o no de este medicamento para el tratamiento médico del COVID-19, con el acompañamiento de la comunidad científica”, dice finalmente la institución universitaria.

Apoyo del secretario de Salud de Popayán al Interferón

El secretario de Salud del Municipio de Popayán, Óscar Ospina Quintero, en carta fechada el pasado 20 de abril, le dice al rector de la Universidad del Valle,  Edgar Varela Barrios, que el profesor titular Julián Alberto Herrera Murgueitio, adscrito a la Escuela de Medicina de la Facultad de Salud de esa universidad, es el director Científico de una propuesta de investigación para la atención integral de la pandemia por COVID-19, tanto en lo domiciliario como en lo hospitalario, con una segunda fase en lo comunitario, específicamente en los municipios de Popayán, Santander de Quilichao y de Argelia en el Departamento del Cauca. “Desde la Secretaría de Salud de Popayán cuenta (sic) en nuestro aval”. 

Agrega que en el protocolo del proyecto, actualmente en estudio por el Comité de Ética del Hospital Universitario San José de Popayán y de la Facultad de Salud de la Universidad del Valle, se requiere para llevar adelante este estudio piloto, cuantificar la carga viral (PCR) de pacientes infectados por el COVID-19 antes y después de la intervención (una semana después). Por ser una prueba piloto, añade, la muestra no es tan grande, pero sí es esencial para los objetivos del mismo y para la población del Municipio. 

“El Laboratorio de Virología del Departamento de Microbiología de la Escuela de Ciencias Básicas de la Facultad de Salud de la Universidad del Valle, está en capacidad de hacerlo. En medio de esta pandemia acudimos a usted para que valore nuestra necesidad de salud pública y con su autorización puedan los investigadores hacer las pruebas en este laboratorio que está debidamente acreditado por el Instituto Nacional de Salud”, afirma finalmente Ospina Quintero.

Precisamente, el secretario de Salud de Popayán, autoridad sanitaria y gran entusiasta del uso del interferón, en declaraciones a medios de comunicación de la ciudad, ha dicho que desde hace varios meses se estudia aplicar interferón para prevenir y curar el Covid-19, tratamiento propuesto por el médico inmunólogo Julio César Klinger. “Es una investigación debidamente estructurada”, aseveró Ospina Quintero.

Agregó el funcionario municipal, “Estamos recogiendo la información para protocolizar el tema. Este estudio además cuenta con la presencia de la Universidad del Valle y el aval del hospital San José, como requisito que pide la norma, con el fin de que este medicamento sea preescrito para atender la pandemia”, aseguró el secretario de Salud de Popayán.

Aclaración de la Facultad de Salud de Univalle

La Facultad de Salud de la Universidad del Valle, en comunicado a la opinión pública, fechado el 28 de julio de 2020, aclara que la investigación y el uso de Interferón sublingual β-1B, no hace parte de la labor investigativa de esa institución de educación superior.

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Igualmente aclara, que la Gobernación del Cauca, por intermedio de la Secretaría de salud del Departamento, solicitó colaboración a un docente investigador de esa universidad para elaborar un protocolo de investigación que contó con el apoyo de talento humano de varias instituciones. 

Añade, que se obtuvo el aval del Comité de Ética del Hospital Universitario San José de Popayán, requisito indispensable para poderlo someter a la autoridad sanitaria competente, y dado que no se completaron los requerimientos que el docente investigador de la institución estimó indispensables para poder seguir su trámite, el proyecto nunca inició, y por lo tanto jamás se administró el medicamento a pacientes con diagnóstico de Covid-19.

“Dada esta situación se solicitó revocatoria del aval ético en estricto cumplimiento de la norma”, dice el mencionado comunicado.

Investigador se retiró del proyecto

El docente investigador, al que se refiere el decano de Salud de la Universidad del Valle,  es el médico Julián Alberto Herrera Murgueitio, quien aparece en el protocolo como el director científico del proyecto. Al comunicador Ladino le dijo que su participación en la prueba piloto, así como en el posible estudio clínico, se vieron truncados por la resolución 000730 del Ministerio de Salud, en la que se reglamentan los requisitos para poder realizar ensayos clínicos sobre Covid-19 en Colombia. 

En días pasados el investigador Herrera Murgueitio, solicitó la revocatoria del aval al Comité de Ética del Hospital San José, y dejó la coordinación científica del estudio piloto, del que afirmó que nunca se inició con pacientes Covid-19, por lo que le extrañaba que se le atribuya un estudio clínico con Interferón β-B1, el cual no tenía las características como tal. También le dijo al comunicador Ladino, que era más grave aún, que se mezclara su intención de aportarle al conocimiento con la fabricación, distribución y venta del Interferón sublingual.

¿Y el estudio del que habla Ospina?

Al renunciar el director científico del proyecto, no se sabe qué pasará, si se seguirá con la iniciativa del estudio del Interferón para prevenir y curar el Covid-19, tratamiento propuesto por el médico inmunólogo Julio César Klinger. Lo que sí se sabe, es que sin estudio y mucho menos sin autorización, ni registro sanitario Invima, este interferón Beta 1B se ha vendido no solo en Popayán, sino en Nariño y Putumayo.  

En la página web de la Fundación Klinger, dice: “Asesoramos el comité científico de la Gobernación del Cauca, en marcha estudio clínico para el uso terapéutico y profiláctico con Interferón Sublingual PILOT TRIAL COVID-19, divulgación del conocimiento de los virus y medidas protectoras a la comunidad y educación al personal médico. Proyecto en genómica en alianza con Unicauca presentado a Minciencias, Asesorías telefónicas y asistencia a personas con covid-19.

Tenemos disponible interferón sublingual para la prevensión (sic) del virus SARS-CoV-2”.

Solo hay un estudio autorizado por el Invima 

En comunicado de prensa de fecha 29 de julio, el Invima informa que el uso del medicamento Interferón Beta solo está autorizado para tratar síntomas relacionados con COVID-19, en las instituciones que adelanten ensayos clínicos previamente aprobados por esa autoridad sanitaria. A la fecha, agrega, el único ensayo clínico autorizado en el país con este medicamento es “Solidaridad”, patrocinado por la OMS, el cual tiene aprobado el uso del Interferón beta 1A en uno de sus brazos de tratamiento. Este medicamento solo puede ser usado en las 9 instituciones que cuentan con aprobación, a la fecha, en el marco del ensayo clínico, como son:  

• Clínica Colombia, Clínica Infantil Santa María del Lago, Clínica Reina Sofía, Fundación Cardioinfantil y Fundación Santa Fe de Bogotá, en la ciudad de Bogotá; 

• Clínica Sebastián de Belalcázar, Centro Médico Imbanaco y la Fundación Valle del Lili en Cali; 

• Clínica Iberoamérica en Barranquilla.

A nivel mundial se están desarrollando investigaciones sobre el uso de interferón en el tratamiento de la enfermedad por SARS-CoV2; sin embargo, los datos clínicos sobre su seguridad y eficacia son limitados. 

No existen aún evidencias ni resultados robustos que demuestren la eficacia del medicamento en pacientes con COVID-19 y su seguridad es baja, con grandes efectos adversos de relevancia clínica, dice el comunicado del Invima, que este portal publicará en su integridad para mayor información de los lectores.

Freddy Ladino, caucano, comunicador social, autor del derecho de petición al Invima, que puso en el centro del debate el Interferón Beta-B1. 

¿Qué pasa con las autoridades sanitarias de Popayán y el Cauca? 

Ahora, que oficialmente el Invima como autoridad sanitaria nacional prohíbe taxativamente la publicidad, información, recomendación y/o promoción y comercialización del  Interferón, “ya sea porque se trate de presentaciones que no cuentan con registro sanitario vigente en Colombia o que se estén utilizando para prevenir o tratar el COVID-19, sin estar autorizados en el marco de un ensayo clínico aprobado por el Invima”, dice el comunicado de esa entidad.

Además agrega, al referirse a la opinión pública: Igualmente, informe a entes territoriales de salud, si por cualquier motivo usted tiene conocimiento de lugares donde se distribuyan o comercialicen estos productos sin dar cumplimiento a la normatividad sanitaria vigente, ya sea porque se trate de presentaciones que no cuentan con registro sanitario vigente en Colombia o que se estén utilizando para prevenir o tratar el COVID-19, sin estar autorizados en el marco de un ensayo clínico aprobado por el Invima”.

En momentos en que, además de que el Invima respondió el derecho de petición del comunicador Ladino, a través de quien se visibilizó lo del uso y venta del Interferón en Popayán, ya se hizo pública a nivel nacional la posición del Invima, cuyo director ha dado declaraciones en diferentes medios.

Según lo anterior, cabe preguntar, ¿cuál será el proceder de la autoridad sanitaria municipal, en cabeza del secretario de Salud de Popayán, Óscar Ospina? ¿Será que por su compromiso con el Interferón y la fundación Klinger, lo inhiben para actuar? Pero no solo este medicamente lo está comercializando dicha Fundación, también otros comercios en Popayán, con presentación, incluso, más sofisticada. 

Igualmente, es preciso conocer la posición de la Secretaría de Salud del Departamento, máxime cuando la Gobernación del Cauca y algunos de sus funcionarios aparecen participando en este proyecto que no está avalado por el Invima. La opinión pública necesita claridad.   

 Médico Klinger defiende el uso del interferón

Recientemente, el médico Julio César Klinger, en entrevista con Radio Súper Popayán,  defendió la investigación y el uso del Interferón como prevención y tratamiento para el coronavirus.

Les dijo a los periodistas de esa emisora, que por lucha de clases, racismo o simplemente envidia son descalificados sus avances e hizo referencia al caso de Barbacoas, Nariño, en donde la gente enferma teme informar por las amenazas de grupos ilegales que advierten, que quien tenga el virus será eliminado. 

“Allí encontramos personas tosiendo en condiciones de extrema pobreza, horas después del uso del interferón estaban jugando parqués”, comentó en Radio Súper.

Descalificó a la Asociación Colombiana de Infectología, de la que dijo, es una organización atrasada en ciencia, así como el Invima, del que solo resaltó que en lo único que tiene razón es que la venta de Interferón por particulares es fraudulenta.

Lamentó que la Universidad del Cauca desconozca su trabajo. Dijo que se repite la historia cuando en los años 90 habló siendo docente de tratamientos contra el Sida, justamente con el mismo producto y estuvo a punto de ser retirado de la facultad de Medicina.

El médico Klinger, afirmó en esa entrevista que el ofrece al Gobierno su conocimiento para que se masifique el tratamiento sin fines lucrativos, y advirtió que detrás de la cura y las vacunas hay muchas organizaciones en pro lucrativo.

Sin respuesta

Este portal llamó varias veces a tres números celulares del doctor Klinger, pero siempre estuvo en buzón o con el buzón lleno. Este medio seguirá insistiendo en hablar con el ex docente de Unicauca.   

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