Alcalde incumplió compromiso de transferir recursos de sobretasa a Bomberos de Popayán

Por en mayo 3, 2024

La institución bomberil emitió comunicado en el que informa que, dada su precaria situación financiera, suspenderá atención prehospitalaria y servicios sociales.

El pasado 16 de abril el alcalde de Popayán, Juan Carlos Muñoz Bravo, se comprometió con el Cuerpo de Bomberos Voluntarios de Popayán, en reunión con su comandante, subteniente Francisco José Arboleda Hartmann, a que, el 30 de abril, a más tardar, esa institución de servicio empezaría a recibir las transferencias de los recursos derivados de la sobretasa bomberil, que pagan los contribuyentes para la labor que adelanta en el municipio  dicha entidad; sin embargo, ese compromiso se ha incumplido, porque a la asesora jurídica se le ocurre que es necesario un Acuerdo con el que se tenga la obligación de contratar con el Cuerpo de Bomberos, cuando no se requiere.

Han transcurrido cuatro meses del año 2024 y no ha sido posible que el municipio le gire el dinero que recauda de los contribuyentes, por lo que el Cuerpo de Bomberos debió apelar a recursos propios para solventar los gastos, pero ya la situación financiera es preocupante.

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Precisamente, en comunicado, dicha institución de servicio a la comunidad, además respetada por ella, se ha visto en la necesidad de anunciar medidas que restringen su accionar.

En el mencionado mensaje que lleva las firmas del comandante Francisco José Arboleda Hartmann y del presidente del Consejo de Oficiales, Antonio Duban Hernández Quibano, dice: “Tras una exhaustiva evaluación de nuestra situación financiera, lamentamos informar que nos vemos obligados a suspender hasta nueva orden la Atención Prehospitalaria y servicios sociales. Esta decisión se debe a la falta de recursos económicos, derivada del retraso en la suscripción del convenio de la sobretasa bomberil. Esta sobretasa, vital para nuestra operatividad, consiste en la transferencia de los recursos que la ciudadanía ya ha aportado a la Alcaldía Municipal y que, a su vez, deben ser transferidos a nuestra institución. La demora en su formalización nos ha dejado en una situación delicada.

Entendemos la preocupación de la comunidad ante esta noticia, y queremos reiterar que hemos tenido toda la voluntad y hemos agotado todas las instancias para superar esta difícil situación; en declaraciones públicas hechas el 16 de abril la Alcaldía Municipal manifestó que a 30 de este mismo mes se haría la transferencia de la sobretasa bomberil, pero no fue así.

Es importante señalar que, aunque nos vemos en la necesidad de suspender ciertos servicios, seguiremos atendiendo aquellos que son considerados esenciales, como: Atención de incendios, rescates en todas sus modalidades e incidentes que involucren materiales peligrosos, hasta tanto el Ministerio del Trabajo nos autorice la posible suspensión de contratos laborales si la situación no mejora.

A partir de hoy jueves 2 de mayo, a las 23:59 horas, nos veremos en la obligación de restringir la atención de ambulancias y servicios sociales debido al agotamiento de nuestros recursos propios. Desde el 1 de enero hasta la fecha, el constante ejercicio de nuestras labores ha llevado al agotamiento de nuestras reservas de insumos estratégicos, incluido el suministro de oxígeno para las ambulancias, debido a la falta de recursos económicos”.

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¿Errada interpretación?

Al parecer la interpretación hecha por la asesora jurídica del Municipio de Popayán, Ana Patricia Prado, frente al convenio con el Cuerpo de Bomberos Voluntarios, no es acertada.

La sobretasa bomberil que fue regulada en diciembre del 2011 mediante Acuerdo Municipal y que empezó a regir en enero de 2012, determina que la contribución se crea sobre la base del impuesto predial que pagan los propietarios de inmuebles, aporte que se escalafona según una tabla que se modificó en el 2016 y luego en el 2018 en algunos puntos básicos.

El proyecto de Acuerdo establece que el municipio de Popayán crea la sobretasa bomberil con base en la Leyes 1575 de 2012 y 322 de 1996 para que las personas contribuyan con ese parafiscal, a fin de sostener y desarrollar la actividad bomberil. En ese mismo orden, el Acuerdo indica que se debe suscribir un convenio de transferencia de los recursos para que el Cuerpo de Bomberos cumpla con sus actividades, no es un contrato de servicios, tampoco un contrato por licitación, puesto que es por desarrollo directo, debido a que en Popayán solo hay una persona jurídica que desarrolla ese servicio al que se refiere la Ley 1575 y no hay cuerpo de bomberos oficial.

Según abogados consultados por La Campana, el convenio de transferencia debe ser integrado en el presupuesto del municipio con los recursos que se recaudan de la vigencia del impuesto predial respectivo y, normalmente, al año siguiente los recursos que van entrando de las vigencias vencidas, se van trasladando y deben conducirse por una fiducia, como está establecido en el municipio después de la restructuración de pasivos que se hizo a comienzos del 2000.

En la actual situación, con el cambio de Gobierno y gabinete, la jefe de la Oficina Asesora Jurídica del municipio, estableció que debía desarrollarse un proyecto de Acuerdo en el que se fijara que el alcalde conmutara las cuantías para contratar y establecer los casos en los cuales tenía que darse una autorización del Concejo y en cuales no, entonces amplió el abanico de la contratación con entidades sin ánimo de lucro, con los convenios interadministrativos, los interinstitucionales, etc., con nuevas cuantías reformando el Acuerdo que desde el 2015 establece qué es lo que el alcalde puede y no puede contratar con base en los mismos predicamentos de la Ley.

Ese proyecto de Acuerdo, presentado por el alcalde en las sesiones extraordinarias, generó muchas suspicacias y dudas en el Concejo de Popayán, por lo que esa corporación no le dio trámite y fue retirado. La Alcaldía volvió a presentar un nuevo proyecto de Acuerdo, que muchos no han entendido y califican de “extraño”, regularizando que el proyecto de Acuerdo se relaciona con Bomberos; o sea, que vuelve y juega, puesto que no se requiere proyecto de Acuerdo para convenir con el cuerpo de Bomberos, porque, primero, la asignación está; segundo, el Acuerdo también está y faculta al alcalde y, tercero, la ley lo obliga. Han pasado cuatro meses y no ha sucedido nada, porque a la jurídica del municipio se le ocurre que hay que presentar un proyecto de Acuerdo, con el que se tenga la obligación de contratar con el Cuerpo de Bomberos, entre tanto esa institución que trabaja sin descanso, está urgida del dinero del impuesto bomberil que pagan los contribuyentes.        

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